Investigadores de la UNL-Conicet tomaron muestras de esos pequeños invertebrados para saber cuál es la situación de las superficies. Los lugares donde se practica el monocultivo intensivo denotaban un agotamiento considerable.
Prensa UNL
Las lombrices se asemejan a “laboratorios andantes”, porque pueden indicar el estado de los suelos donde se encuentran. Esta vez sirvieron para demostrar la situación de muchos de los campos que se explotan en la provincia de Santa Fe, algunos seriamente perturbados, opinaron investigadores de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) y el Conicet.